ENTREVISTA GEA – ALBERTO FRAILE

Alberto Fraile se define como un buscador de respuestas. Este periodista mallorquín volvió a la isla tras casi siete años en Madrid buscando responder a esas preguntas que realmente le importaban. Tras hacer el camino de Santiago y encontrar allí la inspiración, creo junto con Alberto Tugores, la revista Namaste en 2003, proyecto que sigue dirigiendo después de once años. Satish Kumar, Vandana Shiva o Eckhart Tolle han sido personalidades a las que ha podido conocer y que se han convertido en su brújula vital. El 29 de mayo podremos escucharle en La Casa Encendida en Madrid dentro del ciclo Despierta el Planeta te Necesita, junto a Jonathan Dawson, hablando de cómo sería una economía en la que la gente y el planeta sí importaran.

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 Alberto Fraile

Foto cedida por el entrevistado.

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ENTREVISTA GEA – ALBERTO FRAILE 

Por María Álvaro Navarro para GEA PHOTOWORDS

 

El festival lleva por nombre “Despierta el planeta te necesita”. ¿Qué más necesitamos los seres humanos para darnos cuenta de que los recursos del planeta son limitados y que estamos acabando con ellos?

Ya hay bastantes pistas e información sobre la mesa de que el crecimiento infinito en un planeta finito es imposible. Básicamente lo que tenemos es que empezar a disfrutar de lo que ya tenemos. Hay un problema de ansiedad e insatisfacción constante. Deseamos más y más cosas y en vez de saborear lo que ya tenemos, queremos sustituirlo enseguida. Quizás el paso más importante sería aprender a lograr la satisfacción con cosas que no consumen recursos como un buen paseo, una buena comida, una buena conversación, un rato con nuestros hijos que son cosas que realmente le dan sentido a la vida. Nos comportamos como un hámster dando vueltas en la jaula corriendo detrás de cosas que luego realmente no nos satisfacen.

 

Haciendo referencia al título de la jornada del festival en la que participas como ponente ¿Cómo sería la economía si la gente y el planeta sí importaran?

La economía en este momento está al servicio de una serie de corporaciones y oligopolios. Los representantes políticos están más al servicio de estos entramados empresariales que no de los ciudadanos. Una economía donde los ciudadanos realmente importen es aquella que no depende tanto del crecimiento sino más bien de la economía del bien común. Una economía que prioriza una serie de valores por encima del lucro y del crecimiento ciego. Probablemente si las grandes empresas de la alimentación o energéticas imputaran en sus precios los daños colaterales que cometen contra el medio ambiente y contra la sociedad los precios serían muchísimo más elevados. Una economía en la que las personas y los ecosistemas importan lo que hace es que prioriza, valora y discrimina positivamente a aquellas empresas que son respetuosas. Actualmente estamos premiando el éxito con unos criterios bastante destructivos.

 

Eres miembro de la Asociación Slow Food Illes Balears. ¿En el mundo del take away y del disponer del tiempo justo para comer, ¿necesitamos volver a adquirir conciencia de lo que hay detrás y quienes están detrás de los alimentos que consumimos?

Exactamente. Detrás de cualquier producto autóctono podemos descubrir la vinculación de ese productor con el paisaje, con la comunidad, con la economía local, con las tradiciones, con los oficios artesanales, con el conocimiento, etc. Cuando hablamos de slow food o de ecogastronomía, no estamos hablando solo de alimentos ecológicos, que también, sino de toda la historia que hay detrás de las personas que los están produciendo. Además esos pequeños agricultores, por ejemplo en Mallorca, cultivan los maravillosos paisajes de la isla. Pero, estos agricultores que hacen las cosas como se tienen que hacer, respetando la tierra, a los trabajadores y las tradiciones y la cultura local están en peligro de extinción.

 

A menudo escuchamos la frase “A mi día le faltan horas”. El tiempo es un bien escaso en las sociedades occidentales ¿Qué es la filosofía slow y qué plantea?

El movimiento slow es una filosofía integral u holística que lo incluye prácticamente todo. El slow food, la economía lenta, la educación lenta, etc. Pero, lo que es alma de este movimiento es que hay que plantearse otra cultura del tiempo que nos haga pararnos y valorar el aquí y el ahora. Si estás saboreando una buena comida, que eso sea lo único que ocupe tu mente en ese momento, o si estas teniendo una buena conversación de sobremesa con unos amigos, ser capaz de disfrutar y de no estar pensando en lo que vas a hacer después. Quitarnos la ansiedad, la angustia y el estrés es el gran secreto, ya que a raíz de ello se construye todo lo demás. Actualmente estamos retransmitiendo a través de las redes sociales en tiempo real nuestra vida, estamos haciendo una crónica constante de lo que nos está pasando. El hecho de estar bien con uno mismo, no necesitar el reconocimiento externo, porque uno se reconoce a sí mismo, eso relaja y permite un uso sano de las tecnologías.

 

¿Crees que la crisis ha sido un momento crucial en el que la sociedad española ha despertado del letargo y ha empezado a buscar y conocer alternativas al modelo económico actual?

Hemos vuelto a aterrizar en nuestra realidad que puede ser un poco dura y nos hemos dado cuenta de que tal vez no somos un país tan avanzado como nos habíamos creído hace diez años. Pensábamos que estábamos en la élite y quizás somos un país que tiene una democracia que no está madura y que tiene un sistema económico donde todavía hay mucho caciquismo y oligarquía. Hemos llegado a una crisis institucional donde se está cuestionando el modelo de convivencia y económico que tenemos. Pero, el poder político ha puesto parches y ha tratado de sostener un sistema que a todas luces es insostenible y no han sabido responder a lo que el 15M la gente pedía a gritos, poder rediseñar el modelo. Esto se ha taponado durante un tiempo pero volverá otra vez a sangrar. No hemos ido al corazón de la crisis, hemos puesto parches y tiritas.

 

En palabras de Vandana Shiva “El primer paso para el cambio se produce en nuestra cabeza.” Tú como periodista, ¿qué papel crees que tienen los medios de comunicación tradicionales en este sentido? ¿Son simples reproductores del modelo hegemónico o están empezando a hacerse eco de que hay alternativas?

En estos seis últimos años ha habido tal tsunami, que ya no se reconoce nada de lo que había. Se ha roto un poco ese modelo oligárquico que existía en el mundo de los medios de comunicación. Ha sido de los pocos sectores en que esa hegemonía de unos pocos grupos si se ha conseguido romper por el tema de las redes sociales y la vorágine de internet. Ha habido una serie de medios alternativos interesantes que han tenido mucha visibilidad en internet y muchos periodistas que se han generado una marca personal con bastante relevancia sin estar apoyados por un grupo mediático potente detrás. Hay casos llamativos como el de Jordi Évole, que ha conseguido en un medio de comunicación como La Sexta que pertenece al mismo grupo que La Razón, introducir una serie de mensajes que hasta ahora solo eran para grupos alternativos y muy informados y él ha conseguido llevarlos al main steam.

 

Desde 2003 diriges el proyecto de la revista Namaste. Dices que te alejaste de los medios tradicionales porque no podías comunicar los temas que te parecían interesantes. ¿Qué valoración haces de estos once años haciendo lo que realmente te gusta?

Yo soy un periodista de provincias. Mallorca es un hervidero de movimientos alternativos. Por la isla pasa mucha gente interesante que viene aquí a descansar o a inspirarse con la belleza de las playas o de la Sierra de Tramuntana. Mi vocación ha sido localizar a esa gente y entrevistarles y generar un medio de comunicación alternativo que diera soporte a ello. Y nos pusimos en el 2003. A raíz de ello han pasado muchas cosas, nos hemos vinculado con muchos movimientos internacionales como slow food y con grupos de activistas locales y se ha ido generando una red muy interesante a la que el medio ha servido de altavoz. Al principio hacíamos una pequeña revista en papel muy humilde, después ya a través de nuestra web y redes sociales pudimos llegar a mucha más gente y ahora en los últimos tiempos hemos creado una asociación para montar un laboratorio de medios. Queremos que toda esa experiencia de Namaste que ha sido muy bonita y muy enriquecedora se pueda convertir en una asociación donde integrar colectivos y generar un laboratorio de medios y proyectos.

 

Hace tres años publicaste “Voces para un nuevo mundo” Una publicación en la que recoges 21 entrevistas a personajes internacionales y nacionales como Vandana Shiva, Eckhart Tolle, Jordi Pigem o Leo Bassi entre otros. ¿Qué te aportó cada uno de ellos y cómo fue recoger todas esas experiencias en un libro?

Ha sido una experiencia de crecimiento personal fantástica. Yo siempre que me pongo delante de un entrevistado le hago aquellas preguntas que de alguna manera me inquietan a mí como persona o como ciudadano y luego pues resulta que eso resuena en otras personas. A mí, la persona que más me ha aportado a nivel personal es Satish Kumar que fue un discípulo de Gandhi. El habla de una trilogía fantástica que es tierra, alma y sociedad en la cual nosotros nos inspiramos que es un poco como la libertad, igualdad, fraternidad de la Revolución Francesa pero del siglo XXI. Amor a la madre tierra y a la naturaleza, desarrollo personal para intentarnos convertir en buenos instrumentos a través de los cuales suene bien la música y darnos cuenta de que no somos seres aislados, somos seres comunitarios. Esa es como la brújula que yo he ido montando en estos años. Todas las personas que he ido entrevistando a lo largo de estos años se pueden colocar en esas tres categorías, tierra, alma y sociedad, porque son completamente inclusivas.

 

Tú te defines como un buscador de respuestas. ¿Necesita la sociedad occidental parar, reflexionar y hacerse muchas más preguntas? 

Lo difícil es el primer punto de la pregunta ¿podemos parar? Esa es la parte más difícil de todas, lo de hacerse preguntas me parece relativamente fácil. Nos encontramos en esta vorágine constante del non-stop que no nos permite hacernos preguntas ni reflexionar. Una vez te consigues parar, las preguntas salen solas.

 

 

`DESPIERTA, EL PLANETA TE NECESITA´

La Asociación Cultural Despierta presenta la V edición de “Despierta el Planeta te necesita”. Cinco jornadas de debates y proyecciones de documentales en las que se hablará de alimentación sana para el ser humano y para la tierra, de educación, de una nueva economía que tenga como núcleo central al planeta y a las personas, del movimiento transición y de la importancia del cambio climático. Jonathan Dawson, Carlos González, Félix Rodrigo Mora, Rob Hopkins, Juan del Rio, Jordi Pigem, Álvaro Rodríguez o Alberto Fraile entre otros serán las personalidades que formarán parte de las mesas de debate.

 

27,28 y 29 de mayo y 6 -7 de junio

La Casa Encendida (Madrid)

www.asociaciondespierta.org

 

 

María Álvaro Navarro. Periodista valenciana afincada en Madrid. Está dedicada a la comunicación de temas sociales. Ha trabajado en el departamento de comunicación de Cruz Roja Española y en Greenpeace España. También ha trabajado en el programa Medi Ambient de la televisión autonómica valenciana y ha colaborado realizando reportajes con diferentes asociaciones medioambientales. Actualmente forma parte del medio de periodismo social Miradas por el desarrollo.

 

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